Vivo, pienso y reflexiono.
Quién soy?
Qué hago aquí?
Y lo más importante,
Qué quiero y hacía dónde voy?
Estoy sentada en mi sillón otra vez, semidesnuda, descalza con el cabello enmarañado.
Son las 4:05 de la mañana y no pude conciliar el sueño, me siento tan fresca como cuando me ducho al medio día; si ya se que son noches llenas de insomnio y más cuando dormité por la tarde un par de horas.
Debería bajar a la cocina en busca de un té que me haga dormir o al menos descansar mis ojos un momento pero, soy tan testaruda que no puedo tolerar que mi otro yo gane.
Ok pues, he bajado por mi café.
La cocina huele tan rico que me despierta el olor a café tostado y combina con la madrugada fría, las ventanas empañadas que, no sé si es por el vapor del café o porque afuera está helando y yo; semidesnuda.
Siento más frío en el alma que en mi cuerpo _jajajaja.
Wow! Mi taza es enorme! No quiero bajar dos veces obvio. Los ruidos que hace el reloj de pared en la sala me desconcentran, ese tic tac me atrapó otra vez _jajajaja, lo hace cada vez que llegó de madrugada después de una larga jornada de trabajo extenuante, el movimiento de sus manecillas me hipnotiza certeramente y termino tumbada en el sofá casi dormida. Pero está noche no estoy cansada, no he llegado del trabajo así que me iré a mi habitación a tomarme mi café que huele exquisito.
4:13am creo que ya ni siquiera me iré acostar, mis audífonos y mi música me han de ayudar en la espera a que salga el sol para irme a trabajar.
Con las luces medio tenue lo único que resalta es el vapor que despide mi café y la ventana empañada y mi reflejo sobre ella.
Wow! No me había fijado en lo bien que se ve mi tatuaje justo cerca del corazón, para el mundo significa cualquier cosa, para mi es la huella de todos mis sentimientos con nombre: Siempre Tú...
Vanidosa cómo nunca, senxual cómo siempre me admiro en el espejo si, pues traigo unos kilos de más por aquí otros pocos por allá y mis pechos ya reflejan la edad oh dios! ¿Qué ha sido de mí cuerpo?! Ahhh ya sé!!! Parí una vida, un ser que me llenó la existencia que tenía vacía con su sonrisa, su mirada y las miles travesuras que se le han ocurrido, me siento maravillosa de la creación que Dios me permitió gestar en mi vientre, con la semilla de un ser que fue especial.
Continuará...
Quién soy?
Qué hago aquí?
Y lo más importante,
Qué quiero y hacía dónde voy?
Estoy sentada en mi sillón otra vez, semidesnuda, descalza con el cabello enmarañado.
Son las 4:05 de la mañana y no pude conciliar el sueño, me siento tan fresca como cuando me ducho al medio día; si ya se que son noches llenas de insomnio y más cuando dormité por la tarde un par de horas.
Debería bajar a la cocina en busca de un té que me haga dormir o al menos descansar mis ojos un momento pero, soy tan testaruda que no puedo tolerar que mi otro yo gane.
Ok pues, he bajado por mi café.
La cocina huele tan rico que me despierta el olor a café tostado y combina con la madrugada fría, las ventanas empañadas que, no sé si es por el vapor del café o porque afuera está helando y yo; semidesnuda.
Siento más frío en el alma que en mi cuerpo _jajajaja.
Wow! Mi taza es enorme! No quiero bajar dos veces obvio. Los ruidos que hace el reloj de pared en la sala me desconcentran, ese tic tac me atrapó otra vez _jajajaja, lo hace cada vez que llegó de madrugada después de una larga jornada de trabajo extenuante, el movimiento de sus manecillas me hipnotiza certeramente y termino tumbada en el sofá casi dormida. Pero está noche no estoy cansada, no he llegado del trabajo así que me iré a mi habitación a tomarme mi café que huele exquisito.
4:13am creo que ya ni siquiera me iré acostar, mis audífonos y mi música me han de ayudar en la espera a que salga el sol para irme a trabajar.
Con las luces medio tenue lo único que resalta es el vapor que despide mi café y la ventana empañada y mi reflejo sobre ella.
Wow! No me había fijado en lo bien que se ve mi tatuaje justo cerca del corazón, para el mundo significa cualquier cosa, para mi es la huella de todos mis sentimientos con nombre: Siempre Tú...
Vanidosa cómo nunca, senxual cómo siempre me admiro en el espejo si, pues traigo unos kilos de más por aquí otros pocos por allá y mis pechos ya reflejan la edad oh dios! ¿Qué ha sido de mí cuerpo?! Ahhh ya sé!!! Parí una vida, un ser que me llenó la existencia que tenía vacía con su sonrisa, su mirada y las miles travesuras que se le han ocurrido, me siento maravillosa de la creación que Dios me permitió gestar en mi vientre, con la semilla de un ser que fue especial.
Continuará...
