Cuando comienzas a vivir, es cuando empieza la verdadera historia d tu vida.
Escalarta era su nombre, desde niña siempre supo q llegaría a tener y hacer lo q ella quisiera, en aquel entonces confiaba en su actitud positiva y hoy confía en su belleza.
Gozaba d una personalidad arrolladora, cautivadora, sensual y pícara; desde siempre supo sacarle provecho a sus virtudes o defectos le llamaba ella, podría ser una mujer indiferente a la necesidad d los demás pero a la suya esa si era una gran prioridad.
Decidió irse cuando tomó la decisión d volar en busca d lo q más deseaba, su libertad y su plena satisfacción personal. Se sabía bella y a su paso los hombres la miraban con deseo mismo claro q ella comenzó a saborear claro obteniendo un beneficio a cambio.
Así empezó su vida rodeada d la atención masculina dejando su parcial inocencia atrás, no era la típica prostituta q había sido decepcionada en el amor, nunca supo lo q era sentir amor por nadie pero si lo q era el deseo d su cuerpo. Buscó la manera d obtenerlo al coincidir con personas q como una cadena fue uniendo en eslabones hasta llegar al punto máximo d su vida, sus facciones llenas d libido y ternura la hacían deseable para cualquier hombre y fué así como empieza la historia d los Mil Vestidos.
Se sabe q cuando una mujer es obligada a prostituirse y se somete a la orden d alguien más termina perdiendo su criterio y libertad propias, Escarlata no; ella piso ese lugar d mujeres atractivas por su propia decisión se plantó frente a la persona q la iba a manejar y le dijo: _"soy hermosa y bella soy una hembra lo sé y estoy aq porq quiero ser la mejor y tener todo lo q he deseado pero, se lo q valgo y lo q puedo tener y exigir y quiero ser yo quién elija con quien estar y cuando no! "
Se quedó y tomó posesión del lugar como la mejor puta del burdel provocando así envidias entre las q ya tenían una vida ahí. Y si, los hombres al verla vestida como una estrella pedían solo con ella, se sabía q podría estar con el q ella quisiera y así fue durante algunos años mientras tenía el corazón frío y la mente en blanco para nunca enamorarse.
Hasta q sucedió lo inevitable, su patrona tenía un hijo, q llegó del extranjero para visitarla y desde entonces todo cambió para Escarlata...
... Osmar era su nombre, alto buen mozo muy atractivo y masculino recio pero con una mirada tierna y especial, tristemente Escalarta se enamoró.
Congeniaron, convivieron pero Osmar nunca puso en ella sus ojos, sabía por su madre q Escalarta, era una prostituta más del burdel y q como todas ella también tendría frío el corazón y escarcha en la piel. Así q él nunca se fijo en ella, a pesar d su amistad limpia y sincera nunca demostró interés alguno para no perder el respeto q su madre le había enseñado hacia esas mujeres.
Escalarta salía con sus clientes d viaje, regresaba sin apuro cuando quería y ganaba buen dinero mismo q derrochaba en si misma joyas, ropa, maquillaje, zapatos y demás lo q se le pudiera ocurrir, pero nunca ayudar a su familia hasta eso era muy egoísta. Pensaba q el dinero y falso placer la podían distraer d lo q su corazón empezaba a sentir por ese muchacho q le era intocable a ella. Su patrona siempre se lo hizo saber, _" a mi hijo lo vas a respetar, una mujer como tú en su vida? Jamás, si yo me sacrifiqué toda una vida sin él para q tuviera lo mejor y tuviera el privilegio d aspirar a un buen amor, una cualquiera no iba a llegar a echarle a perder sus planes d verle casado con una buena mujer y formar una verdadera familia.
Escalarta se amargo y salió d ese lugar, Osmar se fue a terminar d estudiar y ella buscó otro lugar donde olvidar.
Por primera vez sintió algo en su corazón y no fue correspondido, pensó su hermosura le sería basta para conseguir lo q fuera inclusive el amor d un hombre y no fue así y a raíz d eso, su corazón se hizo más frío y busco la forma más fácil d borrar su recuerdo, robarle el amor a otras q ella nunca podría tener. Se hizo d un amante q le diera placer y dinero, pero no sólo uno sino varios ella quería llenar ese vacío en su alma con las caricias falsas d aquellos hombres q solo deseaban su cuerpo pero q al final d la noche regresaban a su casas buscando el calor humano y la sonrisa d su familia q por supuesto nadie coherente cambia eso por una prostituta.
Hombre q quería hombre q tenía aunq no fuera suyo para siempre aunq fuera unos minutos nadamás ella se aferraba a ellos para su goce personal más q nada su orgullo herido por aquel amor fallido.
Y así, pasaron varios años más, Escalarta ya no era una jovencita hermosa, llena d vigor ni d energía, era simplemente una mujer del montón q nadie buscaba ni llamaba a menos q saliera a pararse a una esquina, ya no buscaba amantes d ocasión ni d turno, solo subía a los coches d los hombres q ella podía ver q traían dinero y podían pagar su precio y teniendo 33 años su belleza se había perdido por completo, su lozanía había desaparecido y parecía una vieja olvidada sin libido.
Hasta q un día se paró frente al espejo y se miró, si alguna vez había llorado esa vez su llanto la habría ahogado, Escalarta veía en el espejo una mujer sola sin el hombre del q se había enamorado, llorando sin parar pensando q había hecho mal para q la vida le hubiese negado ser amada. Y aún así volvió a la esquina con su mente llena d preguntas sin respuesta porq claro ella misma podía responderse y no quería reconocer q cometió muchos errores en su vida, ya no había lujos q quisiera comprar ni belleza q pudiera costear ahora solo era prostituta porq no sabia hacer otra cosa más q vender caricias sin amor.
Fueron mil hombres, los q pasaron por su cama, mil caricias q vendió y mas d mil noches q su corazón murió, cada hombre era un vestido, cada momento era el retoque d su labial rojo carmesí q se borraba en los labios d cualquier hombre q la besaba quizá con pasión y ternura pero ella solo lo hacía por dinero y placer sin comprometer los sentimientos, sin esbozar una sonrisa o haber dicho alguna palabra tierna, Escarlata fue solo un cuerpo q los hombres usaron para su beneplácito porq cuando alguien quiso amarla nunca abrió su corazón y cuando ella quiso amar aquel corazón nunca le correspondió.
Solía escribirle al amor porque pensé que no había nada más importante que el sentimiento hacía alguien especial, he escrito historias que mi mente imaginó desde que era una niña, cuando mi paso por la adolescencia fue crucial y la época que más marcó mi vida. He aquí mis letras que son simples y son para sonreir y para llorar... Atte. MadyQuinRo ❤️
lunes, 3 de abril de 2017
Mil Vestidos
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